LA MUJER CICLISTA


La bicicleta no deja de ser también buena noticia. El mes pasado, se publicaron algunas de las conclusiones del Cuarto Barómetro de la Bicicleta en España, elaborado por el Observatorio Nacional de Seguridad Vial, sobre más de 1.400 encuestas, en el que se destacaba que cerca de tres millones de ciudadanos utilizan la bicicleta para sus desplazamientos, un millón más que hace cuatro años. Un número que, a buen seguro, seguirá creciendo.

Para aportar su grano de arena, como todos los años, la Asociación Medios de Transporte Saludables (AMTS) ha otorgado,  hace unos días, el “Premio a la Movilidad Sostenible AMTS 2011”, con el fin de respaldar y reconocer la labor más destacada a favor de la movilidad sostenible y, en especial, de la bicicleta, por parte de personas o entidades públicas o privadas. Este año, quinta edición del galardón, el premio ha recaído en el colectivo femenino, en concreto, la mujer ciclista.

Con ello, la asociación ha querido reconocer el enorme auge que está tomando la bicicleta entre la población femenina, sin distinción de edades ni clases sociales, y la gran labor que están haciendo en la normalización de la bicicleta y del transporte colectivo en las calles de nuestros pueblos y ciudades. En este sentido, a modo de ejemplo, conviene destacar la altísima participación que están teniendo las mujeres en los cursos de Biciescuela para aprender a circular en bicicleta por la ciudad, impartidos de manera gratuita por AMTS, a través de los programas de Civivox para adultos, en colaboración con el Ayuntamiento de Pamplona. En los diez cursos que llevamos impartidos, de 125 participantes, 105 han sido mujeres, poniéndose de evidencia el gran interés que esta suscitando la bicicleta como medio de transporte en la población en general y de manera especial entre las mujeres. Del mismo modo, en un muestreo que la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona hizo en noviembre de 2010 entre 2.388 personas, una de las cuestiones más llamativas del informe fue que un abrumador 76% de los usuarios de las villavesas eran mujeres, frente a sólo un 24% de hombres.

Todos estos hechos reflejan el papel protagonista que está adoptando la mujer en lo referente a la movilidad sostenible, una asignatura nueva y a la vez necesaria.  La solución de uno de los mayores problemas de todas las ciudades, el del tráfico motorizado individual, está muy lejos de las pegatinas de colores y las restricciones de acceso que se están planteando estos días. Muchas mujeres ya se están dando cuenta de que la única respuesta se encuentra en opciones alternativas como la bicicleta, el transporte público y la peatonalización.



Jesús Sukuntza -Ciclista urbano y miembro de AMTS

La Europa de las bicicletas

La Europa de las bicicletas.



Premio a la Movilidad Sostenible 2011

LA MUJER CICLISTA, GALARDONADA CON EL "PREMIO A LA MOVILIDAD SOSTENIBLE AMTS 2011"
Este año, quinta edición del galardón, el premio ha recaído en el colectivo femenino, en concreto, en "La mujer ciclista". La asociación quiere reconocer así el enorme auge que está teniendo la bicicleta entre la población femenina, sin distinción de edades ni clases sociales, y recompensar la gran labor que están haciendo en la normalización de la bicicleta y el transporte colectivo en las calles de nuestros pueblos y ciudades. Este reconocimiento pretende darles ánimos para continuar acrecentando su uso, que cada día vemos más y más afianzado, rompiendo tópicos y demostrando que la bicicleta no hace distinción de géneros ni de capacidades físicas.



Premio a la Movilidad Sostenible AMTS-2010


Este año, cuarta edición del galardón, el premio ha recaído en el Área de Movilidad del Excelentísimo Ayuntamiento de Pamplona. La Asociación Medios de Transporte Saludables quiere subrayar así la importante labor realizada en los últimos años desde el consistorio pamplonés, materializada en una serie de actuaciones encaminadas a favorecer los modos de movilidad más sostenible y que, a la vez, han consolidado a Pamplona como la cuarta ciudad, a nivel estatal, en número de medidas permanentes orientadas a la sostenibilidad desde 2001 hasta 2009. Entre estos avances, destaca la incorporación explícita de la figura del ciclista como agente de la movilidad en la redacción de la nueva ordenanza municipal de tráfico, lo que supone un reconocimiento y un punto de partida esencial para la futura reorganización de la movilidad en las calles de Pamplona. Igualmente, el consistorio ha impulsado el servicio municipal de alquiler de bicicletas Nbici, que, a pesar de tener algunas carencias que se deben subsanar, ha abierto una vía de movilidad asequible y accesible para muchos ciudadanos. Asimismo, se han impulsado nuevas infraestructuras que, directa o indirectamente, favorecen el uso de la bicicleta en el ámbito urbano, como el espacio intermodal amplio, cómodo y práctico que brinda la nueva estación de autobuses; la instalación de ascensores (Curtidores, Abejeras, etc) que salvan desniveles importantes que podían resultar disuasorios para muchos ciclistas urbanos; los nuevos puentes y pasarelas sobre el río Arga o la peatonalización casi completa, un 80%, del Casco Viejo de Pamplona, que proporciona un entorno agradable y seguro tanto para los ciclistas como para los peatones. Independientemente de las polémicas suscitadas sobre su implantación, la AMTS reconoce el esfuerzo realizado en la creación de nuevos viales ciclistas, principalmente en las zonas de reciente urbanización, aunque los intentos por ciclar el área consolidada de Pamplona han resultado bastante tímidos y la solución de la incorporación de las aceras señalizadas, necesariamente transitoria, aún no aborda la cuestión prioritaria en el proceso de lograr una ciudad sostenible: la necesidad de restar espacio a los automóviles para devolvérselo a los peatones, ciclistas y usuarios del transporte público, que apuestan por una movilidad más responsable y respetuosa con la ciudad. La Asociación Medios de Transporte Saludables es consciente de que éste es sólo el principio de un largo camino. Todos los inicios son difíciles, y este premio quiere reconocer que estos primeros pasos se han dado con firmeza, pero se puede y se debe hacer más: la Asociación tiene la convicción de que el Área de Movilidad del Ayuntamiento de Pamplona seguirá satisfaciendo las demandas de los cada vez más ciudadanos ciclistas, ya que supone una inversión segura en la que no hay perdedores, puesto que gana el usuario, gana la ciudad y gana el medio ambiente. El galardón quiere recompensar e incentivar así la labor del Director del Área de Movilidad del Ayuntamiento de Pamplona, José Reyes Alcácer, que ha resultado un interlocutor dispuesto, accesible e implicado, más allá de sus funciones, para todos los que trabajamos y colaboramos en lograr una ciudad de Pamplona más sostenible.

Normativa de Tráfico de Bicicletas

Extracto del REAL DECRETO 1428/2003, de 21 de noviembre, por el que se aprueba el Reglamento General de Circulación para la aplicación y desarrollo del texto articulado de la Ley sobre tráfico, circulación de vehículos a motor y seguridad vial, aprobado por el Real Decreto Legislativo 339/1990, de 2 de marzo. (BOE 23/12/2003) Nota Aclaratoria: Los conductores de bicicletas, en su condición de usuarios de la vía y conductores de un vehículo deben atenerse a lo que establece el Reglamento General de Circulación para unos y otros. El presente extracto tiene como objeto aquellas disposiciones específicas para ciclos o bicicletas, o bien que establecen excepciones a la norma general para bicicletas o ciclos, así como las obligaciones del resto de usuarios de la vía respecto a los conductores de bicicletas y ciclos o viceversa.
Señalización de obstáculos y peligros Artículo 5.2. No se considerarán obstáculos en la calzada los resaltos en los pasos para peatones y bandas transversales, siempre que cumplan la regulación básica establecida al efecto por el Ministerio de Fomento y se garantice la seguridad vial de los usuarios y, en particular, de los ciclistas. De la carga de vehículos y del transporte de personas y mercancías o cosas (Nota: hace referencia a las sillas para menores, remolques y portabicicletas traseros)

TRANSPORTE DE PERSONAS Artículo 12. Normas relativas a ciclos, ciclomotores y motocicletas. 1. Los ciclos que, por construcción, no puedan ser ocupados por más de una persona podrán transportar, no obstante, cuando el conductor sea mayor de edad, un menor de hasta siete años en asiento adicional que habrá de ser homologado.4. (...) los ciclos y bicicletas podrán arrastrar un remolque o semirremolque, siempre que no superen el 50 por ciento de la masa en vacío del vehículo tractor y se cumplan las siguientes condiciones:a) Que la circulación sea de día y en condiciones que no disminuyan la visibilidad.c) Que en ningún caso transporten personas en el vehículo remolcado.En circulación urbana se estará a lo dispuesto por las ordenanzas correspondientes.

TRANSPORTE DE MERCANCÍAS O COSAS Artículo 15. Dimensiones de la carga. (Nota: Carga de bicicletas y condiciones para los portabicicletas traseros) 3. En (…) los vehículos no destinados exclusivamente al transporte de mercancías la carga podrá sobresalir por la parte posterior hasta un 10 por ciento de su longitud, y si fuera indivisible, un 15 por ciento.4. En los vehículos de anchura inferior a un metro la carga no deberá sobresalir lateralmente más de 0,50 metros a cada lado de su eje longitudinal. No podrá sobresalir por la extremidad anterior, ni más de 0,25 metros por la posterior.6. En todo caso, la carga que sobresalga por detrás de los vehículos a que se refieren los apartados 2 y 3 deberá ser señalizada por medio de la señal V-20 a que se refiere el artículo 173 y cuyas características se establecen en el anexo XI del Reglamento General de Vehículos. Esta señal se deberá colocar en el extremo posterior de la carga de manera que quede constantemente perpendicular al eje del vehículo. Cuando la carga sobresalga longitudinalmente por toda la anchura de la parte posterior del vehículo, se colocarán transversalmente dos paneles de señalización, cada uno en un extremo de la carga o de la anchura del material que sobresalga. Ambos paneles deberán colocarse de tal manera que formen una geometría de "v" invertida.Cuando el vehículo circule entre la puesta y la salida del sol o bajo condiciones meteorológicas o ambientales que disminuyan sensiblemente la visibilidad, la carga deberá ir señalizada, además, con una luz roja. Cuando la carga sobresalga por delante, la señalización deberá hacerse por medio de una luz blanca. Normas sobre bebidas alcohólicas estupefacientes, psicotrópicos, estimulantes u otras sustancias análogas (Nota: los conductores de bicicletas tienen las mismas obligaciones y restricciones que el resto de conductores)

Artículo 20. Tasas de alcohol en sangre y aire espirado. No podrán circular por las vías objeto de la legislación sobre tráfico, circulación de vehículos a motor y seguridad vial los conductores de vehículos ni los conductores de bicicletas con una tasa de alcohol en sangre superior a 0,5 gramos por litro, o de alcohol en aire espirado superior a 0,25 miligramos por litro.
Artículo 27. Estupefacientes, psicotrópicos, estimulantes u otras sustancias análogas. 1. No podrán circular por las vías objeto de la legislación sobre tráfico, circulación de vehículos a motor seguridad vial los conductores de vehículos o bicicletas que hayan ingerido o incorporado a su organismo psicotrópicos, estimulantes u otras sustancias análogas, entre las que se incluirán, en cualquier caso, los medicamentos u otras sustancias bajo cuyo efecto se altere el estado físico o mental apropiado para circular peligro. De la circulación de vehículos (Nota: por donde se debe o no circular en bicicleta y vehiculo de acompañamiento; circulación paralela)

Artículo 35. Utilización de los carriles en función de la velocidad señalizada y de los reservados a determinados vehículos y a ciertas maniobras. La utilización del carril habilitado para vehículos con alta ocupación (VAO) (…) está prohibida, por tanto, al resto de los vehículos y conjuntos de vehículos, (…) así como a peatones, ciclos, (…)
Artículo 36. Conductores obligados a su utilización. (Arcén) 1. Los conductores de (…) ciclos (…) o vehículos en seguimiento de ciclistas, en el caso de que no exista vía o parte de ella que les esté especialmente destinada, circularán por el arcén de su derecha, si fuera transitable y suficiente para cada uno de éstos, y, si no lo fuera, utilizarán la parte imprescindible de la calzada. (…)En los descensos prolongados con curvas, cuando razones de seguridad lo permitan, los conductores de bicicletas podrán abandonar el arcén y circular por la parte derecha de la calzada que necesiten.2. Se prohíbe que los vehículos enumerados en el apartado anterior circulen en posición paralela, salvo las bicicletas, que podrán hacerlo en columna de a dos, orillándose todo lo posible al extremo derecho de la vía y colocándose en hilera en tramos sin visibilidad, y cuando formen aglomeraciones de tráfico. En las autovías sólo podrán circular por el arcén, sin invadir la calzada en ningún caso. (…)3. El conductor de cualquiera de los vehículos enumerados en el apartado 1, excepto las bicicletas, no podrá adelantar a otro si la duración de la marcha de los vehículos colocados paralelamente excede los 15 segundos o el recorrido efectuado en dicha forma supera los 200 metros.

Artículo 38. Circulación en autopistas y autovías. 1. Se prohíbe circular por autopistas y autovías con (…) bicicletas (…)No obstante lo dispuesto en el párrafo anterior, los conductores de bicicletas mayores de 14 años podrán circular por los arcenes de las autovías, salvo que por razones justificadas de seguridad vial se prohíba mediante la señalización correspondiente. Dicha prohibición se complementará con un panel que informe del itinerario alternativo.
Velocidad Artículo 46. Moderación de la velocidad. Casos. 1. Se circulará a velocidad moderada y, si fuera preciso, se detendrá el vehículo cuando las circunstancias lo exijan, especialmente en los casos siguientes:b) Al aproximarse a ciclos circulando, así como en las intersecciones y en las proximidades de vías de uso exclusivo de ciclos (…).

Artículo 48. Velocidades máximas en vías fuera de poblado. e) Para ciclos, ciclomotores de dos y tres ruedas y cuadriciclos ligeros: 45 kilómetros por hora. No obstante, los conductores de bicicletas podrán superar dicha velocidad máxima en aquellos tramos en los que las circunstancias de la vía permitan desarrollar una velocidad superior.

Artículo 49. Velocidades mínimas en poblado y fuera de poblado. (Nota: vehículo de acompañamiento de ciclistas) 2. Se podrá circular por debajo de los límites mínimos de velocidad en (…) los supuestos de protección o acompañamiento a otros vehículos en que se adecuará la velocidad a la del vehículo acompañado.En estos casos los vehículos de acompañamiento deberán llevar en la parte superior las señales V-21 o V-22, según proceda, previstas en el artículo 173.

Artículo 54. Distancias entre vehículos. (Nota: circulación en grupo) 1. Todo conductor de un vehículo que circule detrás de otro deberá dejar entre ambos un espacio libre que le permita detenerse, en caso de frenado brusco, sin colisionar con él, teniendo en cuenta especialmente la velocidad y las condiciones de adherencia y frenado. No obstante, se permitirá a los conductores de bicicletas circular en grupo sin mantener tal separación, extremando en esta ocasión la atención, a fin de evitar alcances entre ellos (artículo 20.2 del texto articulado).2. Además de lo dispuesto en el apartado anterior, la separación que debe guardar todo conductor de vehículo que circule detrás de otro sin señalar su propósito de adelantamiento deberá ser tal que permita al que a su vez le siga adelantarlo con seguridad, excepto si se trata de ciclistas que circulan en grupo. (artículo 20.3 del texto articulado).

COMPETICIONES Artículo 55. Pruebas deportivas, marchas ciclistas y otros eventos. 1. La celebración de pruebas deportivas cuyo objeto sea competir en espacio o tiempo por las vías o terrenos objeto de la legislación sobre tráfico, circulación de vehículos a motor y seguridad vial, así como la realización de marchas ciclistas u otros eventos, requerirá autorización previa que será expedida conforme a las normas indicadas en el anexo II de este reglamento, las cuales regularán dichas actividades.

Prioridad de paso Artículo 59. Intersecciones. 1. Aun cuando goce de prioridad de paso, ningún conductor deberá penetrar con su vehículo en una intersección o en un paso para peatones o para ciclistas si la situación de la circulación es tal que, previsiblemente, pueda quedar detenido de forma que impida u obstruya la circulación transversal (artículo 24.2 del texto articulado).

Artículo 64. Normas generales y prioridad de paso de ciclistas. Los conductores de bicicletas tienen prioridad de paso respecto a los vehículos de motor:a) Cuando circulen por un carril bici, paso para ciclistas o arcén debidamente señalizados.b) Cuando para entrar en otra vía el vehículo de motor gire a derecha o izquierda, en los supuestos permitidos, y haya un ciclista en sus proximidades.c) Cuando circulando en grupo, el primero haya iniciado ya el cruce o haya entrado en una glorieta.En los demás casos serán aplicables las normas generales sobre prioridad de paso entre vehículos.

Cambios de dirección y de sentido, y marcha atrás Artículo 76. Supuestos especiales. 2. En vías interurbanas, los ciclos (...) si no existe un carril especialmente acondicionado para el giro a la izquierda, deberán situarse a la derecha, fuera de la calzada siempre que sea posible, e iniciarlo desde ese lugar.

Adelantamiento Artículo 84. Obligaciones del que adelanta antes de iniciar la maniobra. 5. A los efectos de este artículo, no se consideran adelantamientos los producidos entre ciclistas que circulen en grupo (artículo 33.4 del texto articulado).

Artículo 85. Obligaciones del que adelanta durante la ejecución de la maniobra. 4. Cuando se adelante fuera de poblado (…) a vehículos de dos ruedas (…), se deberá realizar la maniobra ocupando parte o la totalidad del carril contiguo de la calzada, siempre cuando existan las condiciones precisas para realizar el adelantamiento en las condiciones precisas para realizar el adelantamiento en las condiciones previstas en este reglamento; en todo caso, la separación lateral no será inferior a 1,50 metros. Queda expresamente prohibido adelantar poniendo en peligro o entorpeciendo ciclistas que circulen en sentido contrario.5. El conductor de un vehículo de dos ruedas que pretenda adelantar fuera de poblado a otro cualquiera lo hará de forma que entre aquél y las partes más salientes del vehículo que adelanta quede un espacio no inferior a 1,50 metros.

Artículo 87. Prohibiciones. 1. Queda prohibido adelantar:b) En (…) las intersecciones con vías para ciclistas, (…) (artículo 36.2 del texto articulado).c) En las intersecciones y en sus proximidades, salvo cuando:4º El adelantamiento se realice a vehículos de dos ruedas (artículo 36.3 del texto articulado).

Artículo 88. Vehículos inmovilizados. 1. Cuando en un tramo de vía en el que esté prohibido el adelantamiento se encuentre inmovilizado un vehículo que, en todo o en parte, ocupe la calzada en el carril del sentido de la marcha, salvo que la inmovilización venga impuesta por las necesidades del tráfico, podrá ser rebasado, aunque para ello haya que ocupar la parte de la calzada reservada al sentido contrario, después de haberse cerciorado de que se puede realizar la maniobra sin peligro. Con idénticos requisitos se podrá adelantar a conductores de bicicletas, ciclos, (...) cuando por la velocidad a que circulen puedan ser adelantados sin riesgo para ellos ni para la circulación en general.

Parada y estacionamiento Artículo 94. Lugares prohibidos. 1. Queda prohibido parar: b) En pasos a nivel, pasos para ciclistas y pasos para peatones.c) En los carriles o parte de las vías reservados exclusivamente para la circulación o para el servicio de determinados usuarios.h) En los carriles destinados al uso exclusivo del transporte público urbano, o en los reservados para las bicicletas. 2. Queda prohibido estacionar en los siguientes casos: a) En todos los descritos en el apartado anterior en los que está prohibida la parada.

Utilización del alumbrado USO OBLIGATORIO DEL ALUMBRADO Artículo 98. Normas generales. 3. Las bicicletas, además, estarán dotadas de los elementos reflectantes que, debidamente homologados, se determinan en el Reglamento General de Vehículos.Cuando sea obligatorio el uso del alumbrado, los conductores de bicicletas llevarán, además, colocada alguna prenda reflectante que permita a los conductores y demás usuarios distinguirlos a una distancia de 150 metros, si circulan por vía interurbana.

Otras normas de circulación Artículo 114. Puertas. 1. Se prohíbe llevar abiertas las puertas del vehículo, abrirlas antes de su completa inmovilización y abrirlas o apearse de aquél sin haberse cerciorado previamente de que ello no implica peligro o entorpecimiento para otros usuarios, especialmente cuando se refiere a conductores de bicicletas (artículo 45 del texto articulado). Cinturón, casco y restantes elementos de seguridad

Artículo 118. Cascos y otros elementos de protección. Los conductores de bicicletas y, en su caso, los ocupantes estarán obligados a utilizar cascos de protección homologados o certificados según la legislación vigente, cuando circulen en vías interurbanas, salvo en rampas ascendentes prolongadas, o por razones médicas que se acreditarán conforme establece el artículo 119.3, o en condiciones extremas de calor.Los conductores de bicicletas en competición, y los ciclistas profesionales, ya sea durante los entrenamientos o en competición, se regirán por sus propias normas.

Peatones (Nota: un ciclista que arrastra una bicicleta es considerado un peatón) Artículo 121. Circulación por zonas peatonales. Excepciones. (ciclistas arrastrando una bicicleta, aceras) 1. Los peatones están obligados a transitar por la zona peatonal, salvo cuando ésta no exista o no sea practicable; en tal caso, podrán hacerlo por el arcén o, en su defecto, por la calzada, de acuerdo con las normas que se determinan en este capítulo (artículo 49.1 del texto articulado).2. Sin embargo, aun cuando haya zona peatonal, siempre que adopte las debidas precauciones, podrá circular por el arcén o, si éste no existe o no es transitable, por la calzada: a) El que lleve algún objeto voluminoso o empuje o arrastre un vehículo de reducidas dimensiones que no sea de motor, si su circulación por la zona peatonal o por el arcén pudiera constituir un estorbo considerable para los demás peatones.5. La circulación de toda clase de vehículos en ningún caso deberá efectuarse por las aceras y demás zonas peatonales.

Artículo 122. Circulación por la calzada o el arcén. 4. No obstante lo dispuesto en los apartados 1 y 3, deberán circular siempre por su derecha los que empujen o arrastren un ciclo (…) los cuales habrán de obedecer las señales dirigidas a los conductores de vehículos: las de los agentes y semáforos, siempre; las demás, en cuanto les sean aplicables.5. La circulación por el arcén o por la calzada se hará con prudencia, sin entorpecer innecesariamente la circulación, y aproximándose cuanto sea posible al borde exterior de aquéllos. Salvo en el caso de que formen un cortejo, deberán marchar unos tras otros si la seguridad de la circulación así lo requiere, especialmente en casos de poca visibilidad o de gran densidad de circulación de vehículos.

De la señalización De los tipos y significados de las señales de circulación y marcas viales Artículo 143. Señales con el brazo y otras. (de aplicación en competiciones y marchas ciclistas) a) Bandera roja: indica que a partir del paso del vehículo que la porta, la calzada queda temporalmente cerrada al tráfico de todos los vehículos y usuarios, excepto para aquellos que son acompañados o escoltados por los agentes de la autoridad responsable de la regulación, gestión y control del tráfico.b) Bandera verde: indica que, a partir del paso del vehículo que la porta, la calzada queda de nuevo abierta al tráfico.c) Bandera amarilla: indica al resto de los conductores y usuarios la necesidad de extremar la atención o la proximidad de un peligro. Esta bandera podrá ser también utilizada por el personal auxiliar habilitado que realice funciones de orden, control o seguridad durante el desarrollo de marchas ciclistas o de cualquiera otra actividad, deportiva o no, en las vías objeto de la legislación sobre tráfico, circulación de vehículos a motor y seguridad vial. SEÑALES VERTICALES DE CIRCULACIÓN P-22. Ciclista. Peligro por la proximidad de un paso para ciclistas o de un lugar donde frecuentemente los ciclistas salen a la vía o la cruzan.R-114. Entrada prohibida a ciclos. Prohibición de acceso a ciclos.R-407 a. Vía reservada para ciclos o vía ciclista. Obligación para los conductores de ciclos de circular por la vía a cuya entrada esté situada y prohibición a los demás usuarios de la vía de utilizarla.demás usuarios de la vía de utilizarla.R-407 b. Vía reservada a ciclomotores. Obligación para los conductores de ciclomotores de circular por la vía a cuya entrada esté situada y prohibición a los demás usuarios de la vía de utilizarla.R-409. Camino reservado para animales de montura. Obligación para los jinetes de utilizar con sus animales de montura el camino a cuya entrada esté situada y prohibición a los demás usuarios de la vía de utilizarlo.R-410. Camino reservado para peatones. Obligación para los peatones de transitar por el camino a cuya entrada esté situada y prohibición a los demás usuarios de la vía de utilizarlo.R-505. Fin de vía reservada para ciclos. Señala el lugar desde donde deja de ser aplicable una anterior señal de vía reservada para ciclos.S-3. Vía reservada para automóviles. Indica el principio de una vía reservada a la circulación de automóviles.S-4. Fin de vía reservada para automóviles. Indica el final de una vía reservada para automóviles.S-5. Túnel. Indica el principio y eventualmente el nombre de un túnel, de un paso inferior o de un tramo de vía equiparado a túnel. Podrá llevar en su parte inferior la indicación de la longitud del túnel en metros.S-6. Fin de túnel. Indica el final de un túnel, de un paso inferior o de un tramo de vía equiparado a túnel.S-33. Senda ciclable. Indica la existencia de una vía para peatones y ciclos, segregada del tráfico motorizado, y que discurre por espacios abiertos, parques, jardines o bosques.S-64. Carril bici o vía ciclista adosada a la calzada.Indica que el carril sobre el que está situada la señal de vía ciclista sólo puede ser utilizado por ciclos. Las flechas indicarán el número de carriles de la calzada, así como su sentido de la circulación.S-322. Señal de destino hacia una vía ciclista o senda ciclable. Indica la existencia en la dirección apuntada por la flecha de una vía ciclista o senda ciclable. Las cifras escritas dentro de la señal indican la distancia en kilómetros.S-880. Aplicación de señalización a determinados vehículos. Indica, bajo la señal vertical correspondiente, que la señal se refiere exclusivamente a los vehículos que figuran en el panel, y que pueden ser camiones, vehículos con remolque, autobuses o ciclos.

MARCAS VIALES Artículo 168. Marcas blancas transversales. d) Marca de paso para ciclistas. Una marca consistente en dos líneas transversales discontinuas y paralelas sobre la calzada indica un paso para ciclistas, donde éstos tienen preferencia.
Artículo 170. Otras marcas e inscripciones de color blanco. c) Inscripción de carril o zona reservada. Indica que un carril o zona de la vía están reservados, temporal o permanentemente, para la circulación, parada o estacionamiento de determinados vehículos tales como autobuses (bus), taxis y ciclos.d) Marca de comienzo de carril reservado. Indica el comienzo de un carril reservado para determinados vehículos.e) Marca de vía ciclista. Indica una vía ciclista o senda ciclable.g) Cebreado. Una zona marcada por franjas oblicuas paralelas enmarcadas por una línea continua significa que ningún conductor debe entrar con su vehículo o animal en la citada zona, excepto los obligados a circular por el arcén. Señales en los vehículos V-20. Panel para cargas que sobresalen. Indica quela carga del vehículo sobresale posteriormente (portabicicletas).V-22. Cartel avisador de acompañamiento de ciclistas. Indica la circulación próxima de ciclistas.3. La forma, color, diseño, símbolos, dimensiones, significado y colocación de las señales en los vehículos se ajustarán a lo establecido en el anexo XI del Reglamento General de Vehículos.

Ordenanza municipal de bicicletas de Pamplona

CAPÍTULO IV.- DE LA CIRCULACIÓN Y USO DE LAS BICICLETAS Y CICLOMOTORES.

Artículo 23.- Bicicletas. Las bicicletas, como un vehículo más, sujeto a la normativa vigente en materia de tráfico, circularán con preferencia por las vías ciclistas y calzadas, sin perjuicio de que les esté permitido circular, por el resto vías e itinerarios señalizados. Artículo 24.- Luces, timbre, accesorios y aparcamientos para bicicletas. Las bicicletas deberán disponer de timbre y luces o reflectantes en las condiciones previstas en la legislación vigente. Así mismo, podrán estar dotadas de elementos accesorios adecuados para el transporte de menores y de carga tales como sillas acopladas, remolques, semirremolques y resto de dispositivos debidamente certificados u homologados, con las limitaciones de peso que se estipulen. Las bicicletas deberán estacionarse en los lugares expresamente dispuestos y señalizados para ello y debidamente aseguradas. En los supuestos de no existir tales estacionamientos en un radio de 100 metros, las bicicletas podrán ser estacionadas en zonas peatonales o sobre las aceras y amarradas a elementos del mobiliario urbano solamente cuando con ello no se perjudique a dicho mobiliario y no impidan su uso o su perfecta visibilidad alterando su función ni se entorpezca el tránsito de vehículos o peatones. No se podrá estacionar bicicletas sobre aceras que no tengan más de cuatro metros de anchura.

Artículo 25.- Circulación por las vías ciclistas. Área de Seguridad Ciudadana Dirección Herritarren Segurtasuneko Alorra Zuzendaritza 20 Las vías ciclistas, segregadas del tráfico y de las zonas destinadas al tránsito peatonal, solamente podrán ser utilizadas para la circulación en bicicleta, patines, bicicletas eléctricas y sillas de personas discapacitadas. Los usuarios de tales vías deberán mantener una velocidad moderada no superior a 20 km/h y mantener precaución y cuidado durante la circulación.

Artículo 26.- Circulación de las bicicletas por las aceras. Queda prohibida la circulación de las bicicletas por las aceras. Excepcionalmente las bicicletas podrán circular sólo por aquellas aceras que estén debidamente señalizadas y con las siguientes condiciones: Las bicicletas deberán circular por las bandas señalizadas, teniendo preferencia el peatón en la totalidad de la acera, debiendo mantener los ciclistas una distancia de al menos un metro en las maniobras de adelantamiento o de cruce con los peatones. Si el número de peatones no permite mantener un mínimo de un metro entre el ciclista y ellos, el ciclista deberá bajarse de la bicicleta y cruzar andando a pie. La circulación de bicicletas se realizará a velocidad moderada, adecuada a la de los peatones y siempre por debajo de 10 km/h y sin realizar maniobras negligentes o temerarias que incidan en la seguridad de los peatones. Los ciclistas que circulen por las aceras señalizadas y por las vías ciclistas, al llegar a las calzadas en el punto donde haya paso de peatones o de bicis, deberán detenerse, echar pie a tierra y tras comprobar que son vistos por los vehículos que circulan por la calzada, podrán reanudar su marcha. En estos pasos, los ciclistas tienen preferencia sobre los vehículos que circulan por la calzada.

Artículo 27.- Circulación por parques, paseos y zonas peatonales. Se permite la circulación en bicicletas por los parques públicos, paseos y zonas peatonales, siempre que, al igual que en las aceras, se adecue la velocidad a la de los viandantes, se mantenga una velocidad moderada por debajo de los 10 km/h, y no se realicen maniobras negligentes o temerarias que incidan en la seguridad de los peatones. La preferencia será siempre del peatón, debiendo dejar los ciclistas una distancia de separación con los peatones de al menos un metro. Área de Seguridad Ciudadana Dirección Herritarren Segurtasuneko Alorra Zuzendaritza 21 En los parques públicos, las bicicletas circularán por las zonas pavimentadas y nunca por las zonas verdes. Si existen itinerarios señalizados o marcados dentro de los parques, paseos y zonas peatonales, la circulación de las bicicletas deberá realizarse obligatoriamente por las bandas señalizadas.

Artículo 28.- Circulación por calzadas. Los ciclistas que circulen por la calzada lo harán por el carril de la derecha si hubiera más de uno. De existir carriles reservados a otros vehículos, circularán preferentemente por el carril contiguo al reservado, salvo que esté señalizado como apto para la circulación de bicicletas. Dentro del carril circularán igualmente por su parte derecha. Tendrán la misma consideración que el resto de vehículos, estando obligados a cumplir todas las normas de tráfico. El resto de vehículos al sobrepasar a los ciclistas o al circular en paralelo a ellos, deberán mantener una distancia mínima de seguridad de 1,5 metros. Cuando circulen varios ciclistas juntos podrán hacerlo en paralelo siempre y cuando no entorpezcan el tráfico y no ocupen más de un carril. En estos casos, a los efectos de cruce de semáforos, intersecciones, etc. todo el grupo de ciclistas tendrá la consideración de un único vehículo.

Artículo 29.- Registro de bicicletas. El Área que ostente la competencia en Movilidad podrá crear un registro de bicicletas, exigiendo la inscripción en el mismo a todas las bicicletas que pretendan circular por aceras señalizadas, parques, paseos y áreas peatonales. La inscripción en el registro supondrá la obtención de una matrícula que facultará para circular por las zonas señaladas. Para la inscripción en el registro será necesario estar en posesión de un seguro de responsabilidad civil con las condiciones que se recojan en la resolución de la creación del registro.

La ciudad con más bicicletas que habitantes

Alrededor de la mitad de los residentes en Copenhague, sede de la Cumbre del Clima, utilizan las dos ruedas para ir al trabajo La ciudad en la que se celebra la Cumbre del Clima, Copenhague, es un ejemplo de cómo integrar la lucha contra las emisiones de carbono desde la vida diaria. La capital danesa es una de las capitales del mundo de la bicicleta. ¿Cómo se consigue que el 50% de la población del centro de una urbe vaya a trabajar pedaleando? La Asociación Ciclista Danesa asegura que la clave está en los 329 kilómetros de carriles bici de esta ciudad, pero también debe influir bastante que el 75% del precio de un coche sean impuestos. Gran negocio verde en Copenhague La cumbre planea prorrogar Kioto y un acuerdo paralelo para EE UU Los daneses prefieren las bicicletas para desplazarse, en parte, porque el 75% del precio de un coche son impuestos- C. Á. Cambio climático A FONDO Ver cobertura completa La noticia en otros webs webs en español en otros idiomas Bicicletas urbanas con estilo Subirse a una bicicleta danesa puede resultar un poco complicado al principio, sobre todo, para ponerse en marcha. Lo más habitual es encontrarse en el manillar sólo el freno de la rueda delantera y que la rueda trasera se detenga girando hacia atrás el pedal. Según el Ayuntamiento de Copenhague, en la capital danesa hay más bicicletas que habitantes. Están por todas partes. Eso sí, no se ven bicis de montaña, ni tampoco de servicios de préstamos. Son todas urbanas y a cuál con más estilo. La Embajada Danesa de la Bicicleta -una red de empresas, administraciones y ONG que se encarga de enseñar por el mundo cómo se usa aquí este vehículo no contaminante- afirma que nueve de cada diez daneses tiene una bicicleta y que cada año se venden en el país medio millón de estas máquinas. Ropa de calle y pocos cascos. Los daneses que pedalean por la ciudad van vestidos siempre con ropa de calle y algunos, muchos, van realmente elegantes. Faldas cortas, abrigos largos, botas, trajes, bolsos... Las únicas prendas que parecen vetadas sobre la bici son las deportivas. Además, son pocos los ciclistas que llevan sobre la cabeza un casco. "Se lo pone muy poca gente, nosotros recomendamos llevarlo, pero es voluntario y no hay ninguna norma que obligue a ponérselo", explica Allen Carstensen, de la Asociación Ciclista Danesa. "Aquí la gente no ve la bici como un deporte, sino como una forma de desplazarse". Y es mucha gente la que la utiliza para moverse por la ciudad. El Ayuntamiento estima que cada día se hacen cerca de 1,2 millones de kilómetros en Copenhague, pero en el conjunto del país un 24% de todos los desplazamientos de menos de 6 kilómetros se efectúan también sobre una bici. 329 km de carriles bici. ¿Cómo se convierte una ciudad en una de las capitales de la bicicleta? "La clave está en los carriles bicis, cuando te sientes seguro es cuando te lanzas a subirte a una", comenta convencido Cartensen, que recuerda que un 50% de los habitantes del centro de Copenhague va a trabajar hoy en día en bicicleta. Lo curioso es que, si bien existe una larga tradición del uso de las dos ruedas en Dinamarca, la gran explosión de estos vehículos por todas las calles de la ciudad resulta más bien reciente. "El gran cambio llegó con las infraestructuras que comenzaron a ponerse por todos lados hacen tan sólo diez años". El mismo tiempo en el que se ha duplicado el uso de estas máquinas. Y es que hoy en día existen 329 kilómetros de carril bici, siendo muchas las calles en las que hay uno por cada sentido a un lado y otro de la calzada. Pero también semáforos e indicaciones especiales, aparcamientos de bicicleta, infladores de ruedas en las calles, zonas adaptadas en los trenes y en el metro... Pasión por las dos ruedas. Da igual que haga frío o que se ponga a llover: Siguen pasando bicis por las calles. "Nos gustaría contarles que los daneses son más idealistas que otro, pero no es así. Los daneses montamos en bici porque es práctico y sencillo", advierte un folleto de la Embajada Danesa de la Bicicleta. Hay que ser prácticos, sobre todo, cuando el 75% del precio de un coche son impuestos, lo que hace que un automóvil familiar puede costar unos 50.000 euros. Según la Asociación Ciclista Danesa, en Dinamarca hay 2,1 millones de coches y el 44% de los hogares no tiene ninguno. No pasa nada, se mueven en bici.

NBICI: LA OTRA MEDIA VERDAD

A menudo, cuando oigo hablar sobre las bicicletas de alquiler o de préstamo de cualquier ciudad, y en particular de Pamplona, capto cierto escepticismo hacia ellas, fundamentado casi siempre en criterios económicos y de demanda, argumentando que resultan sumamente deficitarias, ya que, en el caso de Pamplona, cuentan con tan sólo 2.680 abonados.
Como ciclista urbano y, desde fechas recientes, nuevo usuario del servicio municipal Nbici, quisiera destacar, por convicción y por solidaridad, la otra media verdad sobre las bicis de alquiler, la que casi nunca se menciona.
Las bicis de préstamo, ya sean las de Pamplona o las de cualquier otra ciudad, contribuyen, como el resto de las bicicletas, a favorecer la salud de las personas, el medio ambiente y la movilidad sostenible, tres argumentos de primera magnitud y, a la vez, de plena actualidad. Bastaría mencionar que, a efectos de descontaminación atmosférica urbana, 30 nbicis circulando son 30 vehículos a motor menos, con la subsiguiente aportación a aliviar la congestión de tráfico. Esos 30 ciudadanos ciclistas pedaleando y predicando con el ejemplo contribuyen a favorecer la imagen de que la bicicleta es una parte esencial de la solución a los problemas del tráfico en nuestras ciudades.
Es cierto que la infraestructura y logística que requieren dichas bicis hacen que resulten innegable deficitarias. Pero, del mismo modo, no podemos olvidar que el Transporte Público Comarcal (TCC) es, a excepción de la línea 4, deficitaria, con unas pérdidas anuales de 10 millones de euros y tendentes al alza. Sin embargo, a pesar de esta grave deficiencia, a nadie se nos ocurriría cuestionar la validez de dicho transporte. Y es que, desde los postulados de la movilidad sostenible, las bicicletas de alquiler (transporte público individual) y las villavesas (transporte público motorizado y colectivo) son primar hermanas, dos caras de una misma moneda que las administraciones públicas tienen el deber de potenciar en el propósito de salvaguardar la habitabilidad de nuestras ciudades.
Una crítica recurrente a este servicio subraya el uso minoritario que se le da. Nos hemos acostumbrado demasiado fácilmente a delegar nuestras responsabilidades en los cargos públicos que nos gestionan, pero no podemos obviar que parte de la corresponsabilidad del reducido uso de esta iniciativa recae en nosotros como ciudadanos, ciclistas potenciales. De tal manera que, si por nuestra parte no hay un mínimo de actitudes personales comprometidas con la utilización del servicio, difícilmente las bicis de alquiler tendrán éxito. La virtuosidad de ser usuario de la bicicleta no consiste tanto en utilizar la nuestra particular, sino en el uso en sí de cualquier tipo de bicicleta, bien sea la propia u otra de alquiler. A los que habitualmente utilizamos la nuestra, no se nos deberían de caer los anillos por utilizar de vez en cuando las de préstamo. Con este simple gesto, estaríamos socializando y potenciando la bicicleta en sí. Sin pretender que esto suene a lecciones de moralidad, no está de más recordar la máxima de Burke: “Nadie comete mayor error que quien no hace nada porque piensa que solo podría hacer muy poco”. Pues un poco de cada uno es mucho, y más si tenemos en cuenta que el número de usuarios de la bicicleta en Pamplona ronda los 6.000 u 8.000.
Asimismo, el incremento en el número de usuarios estará estrechamente relacionado con la implantación de una extensa red de carriles bici, para satisfacer la imperiosa y legítima necesidad de seguridad y protección frente a los vehículos a motor, y más teniendo en cuenta que no todos tenemos las mismas capacidades físicas de equilibrio, agilidad, reflejos y de claridad de percepción.
Por otro lado, hay que tener en cuenta que la iniciativa en novedosa y que lleva un tiempo crear hábitos de uso. Como todo producto de mercado y, por lo tanto, sujeto a las reglas del marketing, necesita unas fuertes y bien planificadas campañas de promoción para acercarla a la ciudadanía. En mi modesta opinión, y con el deseo de aportar ideas, una posibilidad podría se estimular periódicamente a los usuarios mediante el sorteo de premios, como ya se ha conseguido exitosamente en la experiencia piloto llevada a cabo por el Ayuntamiento del Valle de Aranguren, que ha conseguido un importante incremento de usuarios de bicicletas particulares.
Los ciclistas, en nuestro deseo legítimo de lograr una ciudad más ciclada, no debemos confundir los deseos con la realidad. Las aspiraciones de lograr un cambio sustancial pasan, irremediablemente, por la suma de pequeños cambios individuales. La consecución de un cambio cualitativo requiere sucesivos cambios cuantitativos y un prudencial tiempo de reposo. Las bicicletas de alquiler no son una panacea, pero sí una pequeña, aunque importante, contribución a la promoción de la bicicleta.
Creo fervientemente que, mediante una política inteligente de promoción de las bicicletas de alquiler, acompañada de una conciencia ciudadana comprometida que las apoye, estaremos dando un paso más de acercamiento hacia la Europa de las bicicletas.

Jesús Sukuntza, ciclista urbano

POSTURA DE CONBICI SOBRE LA CONVIVENCIA CICLISTA/PEATÓN

En tanto se construyen más infraestructuras para poder diferenciar el tráfico motorizado del ciclista, como carriles bici o señalización y cumplimiento de zonas 30, creemos positivo poder pedalear en aceras suficientemente anchas o en cualquier zona no motorizada o peatonal.

En estos espacios, el ciclista deberá respetar en todo momento la preferencia del peatón, y si no puede rebasarlo a velocidad de viandante en condiciones de plena seguridad, respetando una distancia de 1 m. del peatón y de la fachada, deberá desistir de intentarlo hasta que se den las condiciones óptimas.
Con esta norma no sería ni molesto ni mucho menos peligroso para ningún ciudadano mientras ejerce de peatón. Más bien ayuda al fomento de la bicicleta.

Ante todo queremos decir alto y claro que nuestra lucha prioritaria es la seguridad de los ciclistas y de otros modos de transporte incluidos los peatones. Lo que ConBici reclama con mayor énfasis son más espacios para las bicicletas en la calzada o mayor seguridad ya sea mediante carriles bici o zonas 20, 30, residenciales, etc. y más zonas peatonales para reducir la presión del automóvil en la ciudad. Pero si apoyamos y alentamos más espacios peatonales, no es a costa de reducirnos nuestro espacio vital. Es para que la ciudad sea más limpia y despejada de malos humos. Afortunadamente las tendencias urbanisticas van en ese camino, pero por falta de hábito se olvida la bicicleta en los paises como el nuestro, donde no existe la cultura de utilizarla y se tiende a verla como una amenaza en vez de como una oportunidad. Los ciclistas, no queremos circular normalmente por las aceras. Es más incómodo también para nosotros por no ser nuestro espacio natural. Pero la prebenda de poder hacerlo es legítima en cuanto a que colaboramos con el medio ambiente y la calidad del aire que todos respiramos. En unas zonas peatonales cada vez más amplias, no podemos condenar a los ciclistas que acceden a ellas a ir caminando y tirando de la bicicleta. Tampoco a que la aparquen extramuros a esa zona y que caminen. A la bicicleta hay que incentivarla con ventajas. Puede llegar puerta a puerta. El trabajador la vigila en su calle mientras la tiene aparcada. Quien va de compras con ella la ve desde dentro del comercio y carga su compra en ella. Y esas ventajas son universales y democráticas. Es decir, para todos los que quieran ejercerla, no sólo para "los ciclistas". En esta foto de Nantes.... ¿sería lógico parar a esta señora y sancionarla, dado que circula por una zona peatonal?. ¿A quien molesta?. (Ver abajo más ejemplos bici-peatón en nuestra cercana Italia).



Estamos de acuerdo en diferenciar zonas peatonales (o zonas no motorizadas) y aceras. Pero ese es otro caballo de batalla. En un medio nacional de comunicación, en el enfrentamiento al que nos sometieron pensamos que forzadamente con el representante de la Asociación de peatones Andando, este dijo: "Nosotros tememos que se entienda que los ciclistas pueden ir por cualquier acera...". Y ese temor lo tenemos nosotros pero al revés, que el titular se simplifique a: "Los ciclisitas podrán ir por las aceras", con el consiguiente revuelo entre los que nunca montan en bicicleta (lo que ha sudecido tras las Jornadas de Córdoba de Febrero de 2011). La educación necesaria para poder hacerlo en adecuadas condiciones, es una de las asignaturas pendientes, pero también llegará con la práctica y con adecuadas campañas de concienciación y educación estatales, autonómicas y municipales.

En realidad las aceras (y sólo las anchas, habitualmente en avenidas principales y con mayor número de carriles y tráfico motorizado más veloz), no las queremos para realizar los grandes trayectos, más bien en trayectos cortos para llegar a lugares concretos y por qué no, para que los ciclistas menos avezados o los niños empiecen a coger, apartados del tráfico motorizado, la confianza necesaria para mezclarse posteriormente con él. Todo esto sin menoscabo de que en aceras con suficiente espacio o en cualquier zona no motorizada donde el ciclista deberá respetar en todo momento la preferencia del peatón, y si no puede rebasarlo en condiciones de plena seguridad y a la velocidad propia de un viandante y una distancia de 1 m. del peatón y de la fachada, deberá desistir de intentarlo hasta que se den las condiciones óptimas.

Bajo nuestro criterio, los niños menores de 12 años podrían ir siempre por las aceras, solos o acompañados de un adulto, como en otros países en los que a los niños les está prohibido ir por la calzada en cualquier situación.

EL EJEMPLO DE BRUSELAS:
En este trabajo que realizamos en Junio del pasado año en Bruselas desde ConBici, el urbanista y responsable de la Red de itinerarios ciclistas de la Región de Bruselas, con gran naturalidad explica que allí no existe una regulación especial para la convivencia peatón-ciclistas, que la regla es sencillamente el sentido común y la prohibición sólo en algunos lugares muy concurridos por el turismo.
Se puede ver en este enlace, con la grabación de calles y señales (En los primero compases se ven aceras con carril bici y en el minuto 10 habla sobre la situación legal en zonas peatonales. Completo dura 15 min.):
http://www.youtube.com/user/LORCABiciudad?feature=mhum#p/a/u/2/4b45vWuwKjk

VIDEO DE BURGOS:
BURGOS CON BICI ha presentado este mes de Febrero un reportaje donde la malinterpretación de las ventajas de la bici en todos los espacios, cuando se puede y es bien utilizada, convierte la promoción de la bicicleta en un fiasco ante la creciente red de zonas peatonales, circunstancia que por otra parte, desde ConBici apoyamos decisivamente para reducir las emisiones de CO2 y mejorar la calidad de vida en nuestras ciudades.
http://www.youtube.com/watch?v=y5MtsKyIrbk

Más información en info@conbici.org

CARRIL BICI, CRIMINALIZAR O PROSPERAR

En fechas recientes, hemos asistido, en algunos medios de comunicación, a una agria polémica sobre los carriles bici de la ciudad de Pamplona, a raíz del fatídico accidente que sufrió Trinidad Remírez el pasado 2 de marzo en el tramo situado en la calle Gayarre. Los abajo firmantes, a título personal y desde nuestro compromiso con la defensa de los intereses ciclistas, lamentamos profundamente el trágico desenlace, pero consideramos desproporcionado el alarmismo generado por algunos sectores, que se han cebado en la crítica al carril bici de Pamplona, con calificativos tan excesivos como “criminal”, “inhumano” o “demencial”. De una manera, a nuestro parecer, tremendamente irresponsable, han invitado a los ciclistas a evitar su uso y han recomendado que, en su lugar, utilicen la calzada para sus desplazamientos.

Nos preguntamos si las críticas de estos sectores hubieran sido tan agrias y contundentes si no nos encontráramos a sólo dos meses de las elecciones municipales. Y hay que dejar una cosa clara: no sería justo que se estuviese instrumentalizando la bicicleta, usándola como arma arrojadiza para conseguir un fin que nada tiene que ver con ella. La bicicleta no es patrimonio de ninguna ideología, ni del poder ni de la oposición, ni de la derecha ni de la izquierda, por lo que los ciclistas no debemos permitir que nadie nos utilice con fines partidistas. Por ello, queremos aportar una reflexión más serena y analizar fríamente qué cuestiones son mejorables y discutibles en los trazados actuales, y cuáles (que también las hay) ya están adecuadamente enfocadas, para tranquilizar a los usuarios, que en este momento estarán injustificadamente alarmados y desorientados por las directrices que algunos representantes del ámbito ciclista han defendido.

La solución de algunos de tratar el carril bici como si fuese poco menos que una trampa mortal y la invitación a desplazarse por la calzada nos parece fuera de toda lógica. La bicicleta es un vehículo vulnerable y nadie de los que la usamos estamos libres de sufrir un percance, pero, afortunadamente, los incidentes son muy escasos, en gran parte gracias a las precauciones de los ciclistas. Pero el riesgo existe, y es mucho mayor circulando (incluso en las zonas 30) entre vehículos mucho más veloces y grandes que en la seguridad que ofrece el espacio reservado del carril bici. Es cierto que supone un riesgo, como se ha visto, cuando las portezuelas de los coches invaden el carril. En la mayoría de los casos, la precaución tanto de conductores como de ciclistas evita cualquier incidente, pero para erradicar cualquier contingencia, proponemos que se intercambien los tipos de aparcamientos, dejando adyacentes al carril bici los que están en batería, añadiendo como protección extra en la línea de delimitación entre éstos y el carril bici unas protecciones metálicas en forma de U invertida que eviten la invasión del carril.

Esta simple solución solventa el problema, pero algunos han querido radicalizar su postura postulando la utilización de la calzada y la eliminación de las vías ciclistas, a las que consideran una chapuza indigna de contribuir a la ciclabilidad de una ciudad. No nos engañemos, no se puede ser amigo de los ciclistas, y a la vez, enemigo de los carriles bici. Tal vez deberían pararse a analizar cómo han actuado los países de más tradición ciclista, que son precisamente donde los conductores de vehículos a motor respetan más la figura del ciclista. Por ejemplo, Holanda no es sólo el paraíso de las dos ruedas, sino también de las vías ciclistas, y la capital de Dinamarca, con 329 km de carriles bici, ha conseguido que el 50% de sus habitantes se desplazen en bicicleta, gracias a una decidida política de extensión de los carriles bici en los últimos años.

Lo que es innegable es que el usuario medio sólo utiliza la bicicleta si se siente seguro. Una encuesta municipal del 2004 arrojaba que un 36% de los encuestados iría en bicicleta si hubiera carril bici (Diario de Navarra, 8 de septiembre de 2004). La realidad es que proponer a todos los ciclistas urbanos que renunciemos a las vías ciclistas (carriles bici y aceras bici) y que, en su lugar, circulemos por la calzada entre coches, autobuses y furgonetas, asfixiados a 20 ó 25 km/h para no entorpecer demasiado la circulación, es una auténtica locura. Olvidan que en el uso de la bicicleta no hay límites de edad, desde los más jóvenes a los más mayores, y que no todos tenemos las mismas condiciones físicas de equilibrio, agilidad, reflejos, oído o vista. Sólo podrían circular los ciclistas osados, experimentados y en una forma física estupenda, y los demás, discriminados y excluidos, tendríamos que renunciar a andar en bici. Frente a esto, es responsabilidad de las autoridades competentes en la planificación de políticas de infraestructuras ciclistas atender a esas legítimas necesidades y demandas de protección y seguridad del usuario mediante la creación de vías ciclistas, fundamentalmente carriles bici en las calzadas, y, si la situación lo requiere y no entorpece al peatón, aceras bici.

Es evidente que Pamplona no es una ciudad ciclada y que aún queda muchísimo por hacer, pero tenemos la convicción de que el constante incremento en el número de ciclistas al que estamos asistiendo en los últimos años se debe, en gran parte, a la apuesta por estas infraestructuras. Por tanto, queremos concluir, por un lado, proponiendo a las autoridades competentes que se esfuercen por subsanar los errores que se hayan podido cometer e instándoles a continuar extendiendo por nuestra ciudad dichas vías, prioritariamente por la calzada, y siempre con el máximo rigor profesional, y por otro lado, animando a la población ciclista a continuar utilizándolos, incluidos los de Gayarre y Abejeras, y a desoír esas opiniones alarmistas, tal vez interesadas, que hacen un flaco favor a la seguridad de los usuarios y al incremento de los mismos en las calles de nuestra capital.

Jesús Sukuntza, Juan Ignacio Delgado, Paula Yabar

Miembros de la Asociación Medios de Transporte Saludables (AMTS)